Estrés, enemigo a batir
¿Por qué la gripe te ataca justo en exámenes? ¿Por qué cuando justo tienes que dar el 100% las bacterias y virus aparecen?
Por la ansiedad, el agotamiento, en definitiva: el estrés
Cuidado. El estrés en sí mismo no es malo. Es la manera que tiene nuestro cerebro de prepararnos física y mentalmente para el peligro y solo hay dos salidas: huida o confrontación. Puntualmente es beneficioso para cumplir objetivos o salvar alguna situación de vez en cuando.
Lo arriesgado es sufrirlo de manera prolongada. Durante las semanas de exámenes, por ejemplo. La ansiedad por el miedo al fracaso nos mantiene en tensión y esto afecta a nuestro sistema inmune.
El estrés es un mecanismo de vigilancia que defiende al organismo del ataque de virus, bacterias y otras sustancias extrañas. Sus células, linfocitos y macrófagos, cazan y destruyen aquello que nos perjudica. Pero la actividad de estos agentes depende de la relación con otros sistemas: el inmunológico y el endocrino.
En situaciones de alerta, desviamos la energía a los músculos y al cerebro, y movilizamos el cuerpo para la acción. Y eso nos hace restar combustible al sistema de combate de las enfermedades, lo que nos hace más vulnerables. El cuerpo reacciona con la liberación de hormonas y neurotransmisores para ajustarse a las demandas que el medio requiere. Como consecuencia de estas acciones, se producirá una importante disminución de linfocitos en sangre, inmunodepresión y finalmente, la enfermedad.
Para evitar otro quebradero de cabeza más, domina los nervios. Tú eres tu peor enemigo, mantén la calma y reconcíliate contigo mismo.
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