La poesía Española del Renacimiento: características, autores, obras.

Como posiblemente ya sepas, mundoestudiante es una academia de apoyo para lengua y literatura (entre otras asignaturas) y hoy vamos a hablar sobre la poesía española del renacimiento.

El Renacimiento surgió en el siglo XV en Italia, pero su influencia tardó en consolidarse en España las primeras décadas del siglo XVI. Los contactos culturales entre ambos territorios permitieron la llegada a España de ideas como el Humanismo, el antropocentrismo, la exaltación de la Naturaleza como medida de la belleza, la admiración por la Antigüedad Clásica y la búsqueda del equilibrio formal, la proporción y la armonía en las artes.

Poesía renacentista española

De estas primeras confluencias surgió una poesía renacentista española de marcado carácter italianizante y culta, cuyas principales influencias fueron la literatura popular, los modelos clásicos y la poesía italiana (Dante, Petrarca, Boccaccio, Poliziano, etc.).

Igualmente, en la lírica española renacentista convivieron varias corrientes: una lírica cultura en verso castellano (poesía cortesana, cancioneros, etc.), una lírica tradicional de romanceros donde se cultivaba el tópico del amor cortés y, por último, una poesía italianista donde gracias a la labor de eruditos como Juan Boscán se introdujeron en España las formas itálicas y sus principales tópicos literarios (como lo bucólico, el locus amoenus, etc.).

Autores y periodos de la poesía renacentista española

Entre estos primeros autores españoles – considerados prerrenacentistas – destacamos las plumas de Jorge Manrique (Coplas a la muerte de su padre, 1479) e Íñigo López de Mendoza, marqués de Santillana (Cancionero).

Lírica renacentista

La lírica renacentista se divide, en el devenir del siglo XVI, en torno a dos grandes periodos:

• La poesía del primer Renacimiento (primera mitad del siglo XVI). Destacamos la obra de Garcilaso de la Vega (1491-1536), en cuya obra confluyen la lírica hispánica (el cancionero) y la asimilación del petrarquismo y el nuevo arte, donde no faltó la influencia de autores clásicos como Virgilio u Horacio.

Destacan sus Églogas, composiciones de carácter bucólico en la que dos pastores, Salicio y Nemoroso, conversan sobre temas amorosos. En sus rimas sobresale la búsqueda de la armonía, el equilibrio y la exaltación de la Naturaleza.

• La poesía del segundo Renacimiento (segunda mitad del siglo XVI). Siguiendo la influencia y estética petrarquista de Garcilaso, destacamos la obra de Fernando de Herrera (1534-1597). No obstante, surgirán nuevas influencias y temas de la mano de la Contrarreforma y la vivencia espiritual moderna, con una gran influencia de Horacio y la mística. En este sentido, destacamos a dos principales autores:

1. Fray Luis de León (1529-1591). Máximo exponente de la escuela castellana o salmantina. Fue un prolífico traductor de Horacio y Virgilio, así como de obras bíblicas. Su poesía fue muy original, especialmente sus Odas, en las que sigue el modelo horaciano y el cultivo del beatus ille (alabanza de la vida retirada y sencilla). Cultivó igualmente temas ascéticos y místicos.
2. Juan de la Cruz (1542-1591). Autor capital de la mística espiritual española, de la cual participará igualmente Teresa de Ávila. De San Juan de la Cruz destacamos su uso de la lira, el diálogo, el lenguaje figurado y la utilización de la alegoría y el símbolo como medios de transmitir la inefable experiencia mística. De sus obras destacamos, por ejemplo, Cántico espiritual o Noche oscura del alma.